De buenas es sabido por todos que lo que crece en Extremadura adquiere unas cualidades únicas con respecto al resto del mundo. Su clima, la tierra rica en nutrientes y la escasa contaminación, hacen que sus productos sean considerados con la mayor calidad posible, el corcho es uno de ellos.
Extremadura junto con Andalucía, Cataluña y Portugal, es el principal productor mundial de esta materia que es ligera y maleable, aislante, ignífuga e impermeable; es de origen renovable y apto para reciclar una y otra vez, además la corteza del alcornoque se regenera naturalmente, por lo que no supone un daño para esta especie.
El corcho principalmente se utiliza para los tapones de las botellas de vino, pero hoy en día, está aumentando su como material de construcción y en la nueva tecnología aeroespacial. Motivo por el cual la Comunidad de Extremadura realiza cursos de formación para cubrir la demanda de profesionales en el sector que sobrevive a pesar de la crisis económica del país.
Entre todos debemos cuidar el entorno y hacer caso de las campañas de verano contra incendios que insta la comunidad y concienciarnos del cambio climático producido por el uso de electrodomésticos y vehículos que lanzan a nuestra atmósfera los denominados gases de efecto invernadero.
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